Capacitación
Antecedentes:
A los largo de 20 años de experiencia en la atención integral e institucional a niños y niñas IMC, hemos podido observar graves carencias en Ecuador y América Latina, causas de sufrimiento y marginalización del niño o de la niña y de su familia. Frente a esta situación, ha surgido la idea de generar espacios que respondan a necesidades no cubiertas. Nuestros centros de rehabilitación de Quito y Cuenca no pueden asumir estas necesidades demasiado amplias y nuestra ONG siendo en la incapacidad de crear otras Instituciones en el país. Así nació la idea de proponer formaciones en neurodesarrollo en Neurodesarrollo. Desde 1997, hemos desarrollado un programa muy profundo de formación interna de nuestro personal (en rancia y en Ecuador). Para completarlo, hemos realizado cursos, talleres e intercambios en nuestras instituciones con varios especialistas europeos de alto nivel científico. Con ellos, hemos trabajado partiendo de estudios de casos muy concretos, preparados y presentados por nuestros equipos. Este trabajo preliminar seguía con una reflexión y un intercambio sobre los temas abarcados en la consulta. Con los maestros y terapistas, han intervenido en aulas y salas de rehabilitación.
Un Centro de formación en neurodesarrollo: Inaugurado el 24 de febrero 2005 en presencia del Profesor Michel Le Métayer, referencia científica europea en el campo del Neurodesarrollo. Esta entidad formadora interna a la Fundación San Juan de Jerusalén tiene como objetivo de brindar aportes concretos respecto a nuevas concepciones terapéuticas, pedagógicas y más allá de eso generar un cambio social.
Nuestro recorrido nos hace considerar que las verdaderas transformaciones toman base no solamente en la adquisición de nuevas aptitudes - formación técnica y científica – sino y de manera esencial los cambios de actitudes : concientización, capacidad de darse cuenta, de empatía, de trabajo en equipo. Como eje transversal de la Formación, el desarrollo humano personal e interpersonal propone un abordaje relacional humanizado. En los talleres vivénciales los estudiantes han realizado una auto revisión de su proceso interno para luego proyectarlo en cambios a nivel relacional, profesional y en la práctica cotidiana, consolidando de esa forma los procesos de evolución
A los largo de 20 años de experiencia en la atención integral e institucional a niños y niñas IMC, hemos podido observar graves carencias en Ecuador y América Latina, causas de sufrimiento y marginalización del niño o de la niña y de su familia. Frente a esta situación, ha surgido la idea de generar espacios que respondan a necesidades no cubiertas. Nuestros centros de rehabilitación de Quito y Cuenca no pueden asumir estas necesidades demasiado amplias y nuestra ONG siendo en la incapacidad de crear otras Instituciones en el país. Así nació la idea de proponer formaciones en neurodesarrollo en Neurodesarrollo. Desde 1997, hemos desarrollado un programa muy profundo de formación interna de nuestro personal (en rancia y en Ecuador). Para completarlo, hemos realizado cursos, talleres e intercambios en nuestras instituciones con varios especialistas europeos de alto nivel científico. Con ellos, hemos trabajado partiendo de estudios de casos muy concretos, preparados y presentados por nuestros equipos. Este trabajo preliminar seguía con una reflexión y un intercambio sobre los temas abarcados en la consulta. Con los maestros y terapistas, han intervenido en aulas y salas de rehabilitación.
Un Centro de formación en neurodesarrollo: Inaugurado el 24 de febrero 2005 en presencia del Profesor Michel Le Métayer, referencia científica europea en el campo del Neurodesarrollo. Esta entidad formadora interna a la Fundación San Juan de Jerusalén tiene como objetivo de brindar aportes concretos respecto a nuevas concepciones terapéuticas, pedagógicas y más allá de eso generar un cambio social.
Nuestro recorrido nos hace considerar que las verdaderas transformaciones toman base no solamente en la adquisición de nuevas aptitudes - formación técnica y científica – sino y de manera esencial los cambios de actitudes : concientización, capacidad de darse cuenta, de empatía, de trabajo en equipo. Como eje transversal de la Formación, el desarrollo humano personal e interpersonal propone un abordaje relacional humanizado. En los talleres vivénciales los estudiantes han realizado una auto revisión de su proceso interno para luego proyectarlo en cambios a nivel relacional, profesional y en la práctica cotidiana, consolidando de esa forma los procesos de evolución